Risotto cremoso de gambas y limón

🕒 Tiempo total:

35 minutos

🍽️ Raciones:

2-3 personas

🍚 Ingredientes:

• 200 g de arroz arborio o carnaroli

• 250 g de gambas peladas

• 1 cebolla pequeña

• 1 diente de ajo

• 1 litro de caldo de marisco o verduras caliente

• 60 g de queso parmesano rallado

• 1 limón (ralladura y unas gotas de zumo)

• 2 cucharadas de aceite de oliva virgen extra

• 1 cucharada de mantequilla

• Sal y pimienta al gusto

Utensilios recomendados:

• Cazo de acero inoxidable con vertedor anti-goteo — para mantener el caldo siempre caliente.

• Cazoleta o sartén alta antiadherente especial para risottos — distribuye el calor de forma uniforme.

• Cucharón de madera o silicona — indispensable para remover sin romper el grano.

• Rallador fino de acero inoxidable — ideal para el parmesano y la ralladura de limón.

• Báscula digital de precisión — para medir el arroz con exactitud y lograr una textura perfecta.

Preparación paso a paso:

1. Prepara el sofrito:

   En la cazoleta, calienta el aceite de oliva y añade la cebolla y el ajo picados finos. Sofríe a fuego medio hasta que estén transparentes.

2. Incorpora el arroz:

   Añade el arroz y remueve durante 1 minuto para que se impregne del aceite y se selle el grano.

3. Añade el caldo poco a poco:

   Vierte un cucharón de caldo caliente y remueve sin parar hasta que se absorba. Repite este proceso durante unos 18-20 minutos, agregando el caldo poco a poco para conseguir una textura cremosa.

4. Agrega las gambas:

   A mitad de cocción, añade las gambas peladas. Continuar removiendo y añadiendo caldo hasta que el arroz esté al dente.

5. Finaliza el risotto:

   Cuando el arroz esté cremoso y en su punto, retira del fuego y añade la mantequilla, el parmesano y la ralladura de limón. Mezcla suavemente hasta que quede brillante y cremoso.

6. Emplatado gourmet:

   Sirve inmediatamente en platos hondos, decora con unas gotas de aceite de oliva, pimienta negra recién molida y, si quieres, unas gambas enteras salteadas encima.

Consejo extra:

Para un resultado más intenso, puedes flambear ligeramente las gambas con un toque de brandy antes de incorporarlas al risotto.